Áncash. - Facilitar el proceso de reactivación de obras públicas en Áncash será una de las prioridades en la gestión fiscalizadora del nuevo gerente regional de control, Darío Valverde Cueva, quien al asumir el cargo tomó conocimiento de que existen 151 obras en estado de abandono y/o paralizadas en la costa y sierra de la región.
“Tal como anunció el contralor general, es urgente que estas obras se culminen y se pongan a disposición de los ciudadanos. Iniciaremos con el monitoreo de estos proyectos de inversión para encaminar el destrabe de las obras”, señaló.
El abogado, quien se desempeñó por casi una década como auditor en diversos órganos de control institucional en Áncash, Lima y Callao, destacó que es necesario identificar las causas de paralización de cada obra en específico, al considerar que las cifras nacionales reportan que estas obedecen en la mayoría de los casos por la falta de recursos financieros para su ejecución o el incumplimiento del contrato.
En ese sentido, destacó la importancia de que las entidades cumplan con registrar y mantener actualizada la información en el Sistema de Información de Obras Públicas (Infobras). “Esto permitirá asegurar la transparencia en el uso de los recursos del Estado, el acceso a la información pública y el control social de las diversas inversiones que se ejecutan en la región”, resaltó.
Valverde fue designado por Resolución de Contraloría N.° 634-2024-CG, con fecha 23 de octubre del 2024, para dirigir y ejecutar los servicios de control gubernamental en las entidades sujetas al Sistema Nacional de Control en el ámbito de las 20 provincias y 166 distritos de Áncash.
Además, deberá supervisar y monitorear los servicios de control gubernamental que ejecutan los 44 órganos de control institucional (OCI) que actualmente funcionan al interior de igual número de entidades públicas, así como las acciones de control a cargo de la oficina de enlace en Chimbote.
El abogado, quien se desempeñó por casi una década como auditor en diversos órganos de control institucional en Áncash, Lima y Callao, destacó que es necesario identificar las causas de paralización de cada obra en específico, al considerar que las cifras nacionales reportan que estas obedecen en la mayoría de los casos por la falta de recursos financieros para su ejecución o el incumplimiento del contrato.
En ese sentido, destacó la importancia de que las entidades cumplan con registrar y mantener actualizada la información en el Sistema de Información de Obras Públicas (Infobras). “Esto permitirá asegurar la transparencia en el uso de los recursos del Estado, el acceso a la información pública y el control social de las diversas inversiones que se ejecutan en la región”, resaltó.
Además, deberá supervisar y monitorear los servicios de control gubernamental que ejecutan los 44 órganos de control institucional (OCI) que actualmente funcionan al interior de igual número de entidades públicas, así como las acciones de control a cargo de la oficina de enlace en Chimbote.
